Muy interesante este artículo que he encontrado en www.omexpo.com. Creo que no se podría estar tan acertado.
Es el escudo de los cobardes, el refugio de los timoratos, la protección de los políticos mediocres y trasnochados que hasta le han dedicado un ministerio, la palabra más prostituida del diccionario desde que empezó la crisis.
La innovación pertenece a los valientes, a los que se arriesgan, a los que crean empresas y con ellas, puestos de trabajo. La innovación pertenece a los investigadores que prueban nuevas fórmulas para descubrir medicamentos que impiden que te mueras de tuberculosis; pero no a ti. No menciones la palabra innovación si sigues agradando a ese jefe que se aferra al pasado y le pide a su secretaria que le imprima sus emails. Si no has hecho nada nuevo, nada distinto, nada arriesgado. Si te reconfortas en la comodidad de lo que ya conoces, lo que no exige el esfuerzo de aprender y de cuestionarte , si lo que has venido haciendo en los últimos años es lo adecuado para enfrentar los retos del futuro.
No hables de innovación mientras te quedas callado en las reuniones, para
no destacar y con ello, mermar humana y profesionalmente. No pongas en tus labios la palabra innovación desde la comodidad de tu despacho contemplando como caen las ventas de tu empresa porque tú trabajas en otro departamento y eso no va contigo.
Queda muy bien aparentar que estás a favor de la innovación, que estás
dispuesto a arriesgar, pero ya no es creíble. Y como aquí no innova casi
nadie, puedes mirar a tu alredor y ver la sangría de las políticas erróneas
unidas a tu complicidad por querer establecer el status quo de la sociedad
del bienestar que tan buenos resultados te ha dado hasta ahora. No creas
que vas a avanzar mirando hacia atrás, te darás de morros contra una farola
(en el mejor de los casos) o seguirás despidiendo a tus empleados,
arruinando a tus proveedores y pasando a engrosar los ratios de morosidad
bancaria.
El mayor enemigo de la innovación, además de tú mismo, es el éxito. Se
acabo el éxito, estamos en crisis. Vas a querer tener el derecho de
utilizar la palabra innovación?